El audaz Charles Lindbergh se propone cruzar el Atlántico sin escalas, en un vuelo sin precedentes. Desde Nueva York a París, el piloto vive en su avión 36 horas de soledad que suponen una hazaña histórica. .
Privacidad y cookies: este sitio utiliza cookies. Al continuar utilizando esta web, aceptas su uso.
Para obtener más información, incluido cómo controlar las cookies, consulta aquí:
Política de cookies.